Un sonido que no entiendo

Un sonido que no entiendo
mayo 2011

jueves, 29 de diciembre de 2011

Vaca de vacas


Se me salió una vaca.
Aprieto los colores como la primera vez.
Bautizo el blanco,
la linea describe un abundante volumen lechoso y tibio.
Cadencia en cencerro.
Contundente calma sabia.
Mirada cómplice.

Arreglamos la bici


En la playa
uruguaya.
En una casa
con un ceibo y muchas ranas,
había dos bicis
solas, rotas,
destartaladamente tentadoras.

Con maña, alambres,
inflador y ganas,
sólo bastó subirse
...y no bajarse más.

Arreglamos la bici II


La bici saca la pereza y también la fatiga:
Se puede pedalear sin término, pues sobre ella siempre todo comienza.
Bicho generoso, nudo de metal austero, inteligente.
Montado a un biciclo se trata de ser otro y -si se quiere- ser cada vez más uno mismo...

De moda


Raúl González Tuñón escribió un poema llamado "La niña de moda".
Lo compartí con los alumnos de Dibujo de 3º año de Gráfica y me quedé con ganas de ver qué me pasaba con él.
Acudieron a mi memoria los lunares de mi abuela China, los anteojos de Victoria Ocampo, y mis zapatos rojos para no bailar el twist.

Un mero cubo


A veces me siento un mero cubo, como dijo Luisalberto.
Sin posibilidades de curvas, de ondulaciones, de otras maneras rebeldes.
La zurda me pesa.
Densa, embriagada en un ombligo absurdo, oscuro, torturado, limitado.

martes, 27 de diciembre de 2011

Cardos fiesteros


Cardos amigos
guirnaldas del suelo
tapizan el cielo.

Festejamos juntos
la vida que viene
...y no se detiene.

¡Feliz 2012!

lunes, 26 de diciembre de 2011

Fin de año feliz


En el campo
con el pasto hasta la cintura
y el sol mirándome de frente.

En la sombra de la sombra
al reparo, con los grillos
y otros bichos que me quieren.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Como un pétalo


Se fue el pañuelo,
pétalo amarillo.

Con todo el sol
salió de la mano,
el pincel cuerdo,
los ojos calientes,
la mesa robusta,
la casa abierta.

Acarició los techos,
atravezó la tarde de jacarandaes,
entró en la noche.

Así otra mujer lo tuvo entre manos
y eso bastó
para confirmar
su oficio de flor.