Cantar (fragmento)
Es la casa un palomar
y la cama un jazminero.
Las puertas de par en par
y en el fondo el mundo entero.
El hijo, tu corazón
madre que se ha engrandecido.
Dentro de la habitación
todo lo que ha florecido.
El hijo te hace un jardín,
y tú has hecho al hijo, esposa,
La habitación del jazmín,
el palomar de la rosa.
(...)
¿Quién en esta casa entró
y la apartó del desierto?
Para que me acuerde yo
alguien que soy yo y ha muerto.
(...)
Miguel Hernández